Austria y Eslovaquia tienen los gimnasios cerrados mientras que países como Lituania, Rumanía, Países Bajos o Malta tienen severas restricciones de aforo, higiene y horarios, además de pedir el pasaporte sanitario.
La nueva variante Ómicron del Covid´19 complica el panorama del fitness en Europa. Hasta la fecha, dos países (Austria y Eslovaquia) tienen todos los centros de gimnasios cerrados por la evolución de la pandemia, mientras que dieciocho países tienen abierto, pero requieren el paso sanitario para poder acceder a las instalaciones. Con la nueva variante de Covid-19, los países europeos están aumentando las restricciones en los gimnasios y centros deportivos: sólo nueve países no han impuesto todavía restricciones.
Ocho países tienen abierto con restricciones (entre ellos España) pero aún no piden pase sanitario a escala estatal; mientras que sólo siete países tienen los centros abiertos sin ninguna limitación: Reino Unido, Liechtenstein, Noruega, Dinamarca, Macedonia, Turquía y Bosnia, según los datos que actualiza semanalmente EuropeActive, que monitoriza la evolución de las restricciones en los centros deportivos en Europa.
En España, el sector abre con limitaciones como distanciamiento social y límites de aforos y en algunas regiones, como Cataluña, se pide un test negativo o el pase sanitario. De hecho, la exigencia de pase sanitario es la tendencia en toda Europa, sobre todo tras haberse detectado la variante de Ómicron.
Alemania aplica la norma del 3G: ‘geimpft’, ‘getestet’, ‘genesen’ (en español: vacunado, testeado, recuperado)
En Bélgica, además del pase sanitario, los gimnasios pueden abrir, pero con aforo limitado, distancia social y ventilación. Asimismo, en Bulgaria se pide un Green Pass a los empleados y a los consumidores, igual que en Chipre y República, que además cada persona debe disponer de diez metros cuadrados y de quince metros cuadrados para entrenar respectivamente. Hungría, Irlanda, Eslovenia, Suiza, Letonia, Georgia, Grecia también piden el pasaporte.
Francia, país pionero en pedir el pase sanitario, exige un distanciamiento social de dos metros y es obligatorio el uso de una mascarilla cuando se circula por el interior de los gimnasios mientras que Alemania aplica la norma del 3G: geimpft, getestet, genesen, (en español, vacunado, testeado, recuperado). Italia tiene los mismos requisitos a los que suma un mínimo de dos metros cuadrados por usuario para entrenar, mientras que Portugal es más laxa y deja entrenar sin mascarilla, aunque pide certificado para acceder a los centros.
Países Bajos obliga a los gimnasios a cerrar a las cinco de la tarde
Países Bajos, donde el operador Basic-Fit tiene su sede, ha establecido la obligatoriedad del pase sanitario y obliga a cerrar a partir de las cinco de la tarde hasta las cinco de la mañana. Rumania tiene el mismo horario de apertura y pide pasaporte sanitario, pero además sólo deja operar al 30% de la capacidad.
Lituania es uno de los países más estrictos en restricciones. El país báltico, además de pedir una prueba negativa o un comprobante de vacunación, exige al menos veinte metros cuadrados de superficie por persona, incluidos los miembros del personal. Los ejercicios grupales están limitados a cinco personas, excluidos los instructores.
Por otro lado, hay dos países que han optado por cortar el problema de raíz. En Austria, los centros están cerrados, al menos, hasta el 12 de diciembre, cuando será obligatorio enseñar un pase sanitario. Eslovaquia también tiene los gimnasios cerrados.
Croacia pide al menos veinte metros cuadrados por persona para entrenar
Hay países que no piden estar vacunados, pero tienen amplias restricciones. En Croacia, los gimnasios deben proporcionar al menos veinte metros cuadrados por persona y los equipos deben desinfectarse después de cada uso y Finlandia, también pide distancia y ofrece instrucciones de higiene además de certificado de autocontrol.
Luxemburgo pide garantizar diez metros cuadrados por usuario, pero no pide pase sanitario, mientras que Malta obliga a tener tres metros entre personas o una persona entrenando por cada seis metros cuadrados, con un aforo máximo de 75 personas. Polonia también ha regulado en esta línea y obliga a garantizar diez metros cuadrados por usuario, con una distancia de 1,5 metros y con un aforo máximo del 75%.
Islandia, por otro lado, no pide pasaporte, pero sólo deja operar a sus instalaciones al 75% de su capacidad y Ucrania no pide pasaporte pero también tiene limitaciones de aforo y distancia. Suecia tampoco pide el green pass pero establece restricciones de aforo.
Fuente: Palco23