Fuente: EconoJournal – La compañía firmó un acuerdo mediante el cual se comprometió a brindar un aporte para recuperar las instalaciones del Club. Se alió en un esfuerzo de colaboración con el Colegio de Ingenieros de Bahía Blanca.
En respuesta a las devastadoras consecuencias del temporal que azotó Bahía Blanca el pasado 16 de diciembre de 2023, Oleoductos del Valle S.A firmó un convenio en el que se compromete a realizar un aporte para la reconstrucción del Club Talleres de esa ciudad, que ahora busca recuperar sus instalaciones que fueron gravemente afectadas por el desastre natural.
En esta cruzada solidaria, Oldelval, empresa líder en el sector midstream, se unió en un esfuerzo de colaboración con el Colegio de Ingenieros de Bahía Blanca. Esta alianza busca maximizar el impacto de la ayuda y contribuir de manera efectiva a la recuperación de los espacios del histórico club bahiense.
Talleres de Bahía tiene 99 años de historia. El objetivo ahora es llegar al centenario de la institución con la obra de reconstrucción totalmente lista. El colegio de Ingenieros de esa ciudad estará a cargo del proyecto ejecutivo y la certificación de la obra.
La iniciativa
El acuerdo quedó sellado en un acta firmada por los representantes de cada una de las organizaciones mencionadas. Por Oldelval, suscribió su CEO, Ricardo Hösel; Carla Mariani, presidenta de Talleres, lo hizo en representación del club; y por parte del Colegio de Ingenieros de esa ciudad, firmó su presidente, Alejandro Di Chiara.
La firma del acuerdo marco se llevó adelante este lunes en un acto del que participaron Mauricio Mac Kenzie, jefe de RRII; y Paula Urquiza, gerente de Gestión de Personas en representación de Oldelval; acompañados por el intendente de la localidad, Federico Susbielles Rodríguez; la dirigencia del Colegio de Ingenieros, y la presidenta junto a la Comisión Directiva del Club.
El fenómeno, ocurrido a finales del año pasado, resultó en la trágica pérdida de 13 vidas, dejó 14 personas gravemente heridas y obligó a más de 300 residentes a evacuar sus hogares. Las fuertes ráfagas de viento, que alcanzaron velocidades de hasta 150 km/h, causaron graves daños tanto en viviendas como en la infraestructura de la ciudad.