Mientras enfrentan la competencia de los entrenadores de grupos al aire libre, los gyms registran una suba en la cantidad de socios en medio de una apertura de actividades cada vez mayor y la llegada de las estaciones más calurosas.
Después de un año y medio de restricciones muy duras, los gyms se preparan para recibir más socios por estas semanas mientras intentan recuperar sus finanzas, dañadas por las medidas y la competencia de los entrenadores de grupos al aire libre.
“Los gimnasios volvieron a abrir sus puertas después del segundo cierre en julio de este año. Empezamos con un aforo del 30%, pasó en agosto al 50%, después al 70% y ahora 100% de aforo, aunque en vestuarios y duchas el aforo está en el 50%. A partir de julio la demanda empezó a crecer”, explica Fernando Storchi, CEO de Megatlon @megatlon y titular de la Cámara Argentina de Gimnasios.
Agosto y septiembre fueron buenos meses de recuperación, y hoy el sector está “en un 70 o 75% del nivel de actividad prepandemia”, detalla. Por ahora, “se recuperaron entre el 40 y el 50% de los clientes perdidos en la pandemia en estos 3 meses y medio”, dice Storchi. De todos modos, advierte, el nivel mejora en los barrios, pero no todavía en el centro, donde la actividad todavía es “bajísima”.
Miguel Apellaniz, vicepresidente de Gympass @gympass_ar para América Latina hispana, explica que, por ahora, hay un mix de usos. Los usuarios del servicio de suscripción -que permite acceder a una serie de locales y entrenamientos físicos y virtuales- están en este momento utilizando las dos modalidades. “Si bien los programas virtuales parecían convertirse en nuevos competidores, tal como los entrenamientos al aire libre, nuestro último análisis nos mostró que el 98% de los usuarios que utilizaba servicios virtuales mantuvieron su uso. Esto nos demuestra que en esta nueva normalidad no son un reemplazo sino un complemento”, detalla.
El servicio de suscripción es utilizado por algunas empresas como una manera de captar la fidelidad de sus empleados y en forma de “programa de bienestar corporativo”. Esos clientes también están volviendo con fuerza desde septiembre, explica Apellaniz.
“Hay nuevos clientes que antes no tenían un presupuesto designado a un programa de bienestar y ahora, a raíz de los aprendizajes sobre el cuidado de la salud que dejó la pandemia, sí están destinando presupuesto e invirtiendo en el bienestar de sus colaboradores”, detalla, sobre quienes eligen sus servicios. “También hay nichos específicos como lo son las empresas de tecnología que, a raíz de la altísima competencia que tienen para atraer y retener talento, necesitan invertir en darles más beneficios a sus colaboradores como parte de su estrategia de marca empleadora”, concluye.
Con respecto al interior, Diego Scocco, referente del sector y secretario de la Cámara Paranaense de Gimnasios, señalo que registraron un 25% más de clientes poscuarentena. Observó que ya no existe más la tendencia de comenzar a ir al gimnasio conforme se acerca la temporada estival, y aseguró: “La gente entiende que la salud se cuida todo el año, no va más el ‘plan verano’ y las temporadas son muy planas. Cada vez es menos estacional la actividad”.
Sobre las virtudes de hacer actividad física, Scocco remarcó: “Son muchos los beneficios que tiene sobre la salud. En resumen, se recomienda porque la actividad física bien diagramada lleva a incorporar estilos de vida saludables y eso mejora el resto de las condiciones”.
Fuente: TN y Uno Entre Ríos