Cancheros, un oficio que ejercita la paciencia y la responsabilidad

Fuente: UTEDYC – Empatía, compañerismo, pasión son algunos de los valores que demostraron tener Leandro Pace, Sergio Núñez y Luis Frías, los trabajadores encargados del campo de juego del Club Atlético Independiente. Un oficio cada vez más señalado por el periodismo durante las transmisiones deportivas que requiere de capacitación especializada, tener conocimientos climáticos e, incluso, de biología. “Empecé en Domínico (el predio que la institución tiene para entrenar en la semana) y los chicos me enseñaron”, comentó Luis Frías quien trabaja en el club desde 2011. “Comenzaba a cortar una línea y terminaba en el córner”, cuenta entre risas su proceso de aprendizaje.

Más allá de la enseñanza que los tres recibieron de sus propios compañeros, Sergio Núñez, subrayó la influencia que tuvo en su labor la diplomatura que brindó UTEDYC en mantenimiento de campos deportivos: “que lo hagan porque siempre se aprende algo nuevo. Aparecen químicos y máquinas nuevas; además siempre es importante añadir más información para ser mejores en el trabajo”, agregó.

A pesar de estar en el club desde hace 9 años, Sergio Núñez (Af. 319629) comenzó en el área de mantenimiento hasta que confió en sus capacidades y sus ganas de progresar. En la previa de un partido en el que River Plate iba a jugar de local en la cancha de Independiente se acercó a sus dos compañeros y les ofreció una mano. “Fueron, hablaron y cuando me quise acordar estaba laburando con ellos. Después hice el curso de cancheros en UTEDYC con el ingeniero Fabio Solari, conocí el predio de AFA, el Tita Mattiussi (predio de entrenamiento de Racing), River. Igualmente, todos los días se aprende. Gracias a mis compañeros y los ingenieros”, comentó Núñez.

En ese sentido, el afiliado remarcó: “Es un laburo lindo que te enseña a ser paciente. No porque le tires un fertilizante actúa ya. Esto es naturaleza y, por ende, requiere tiempo y paciencia. Nosotros lo tratamos como nuestro hijo. Cuando llegamos lo primero que hacemos es mirar el campo de juego. Hablábamos con los ingenieros que hay veces que nos vamos a casa, volvemos pensando si habrá impactado bien el producto o no, estamos a atentos si va a llover o no para marcar la cancha. Son preocupaciones que tenemos porque queremos al club”, explicó.

La relación con la naturaleza. “Cuando cortás el césped, la planta se estresa. Si la cuchilla no está bien ajustada o está desafilada te la corta mal y la lastima, como una mordida. Entonces la planta siente que la cortaste y eso a la larga termina por enfermar al césped”, remarcó Frías (Af. 239205). Los trabajadores detallaron que para “marcar la cancha” se demora dos horas y se gastan entre 40 y 50 litros de pintura.

Con respecto a la atención del clima, Frías resaltó: “Cuando hay humedad estamos preocupados porque genera hongos”. Además, destacaron la importancia de revisar cuando van cortando “que no haya plagas, que no haya ningún gusano blanco. Cuando vemos que hay algún bicho, le avisamos a la ingeniera y ella nos dice qué cantidad y qué producto le tiramos”.

La resiembra. Leandro Pace, quien desde hace 7 años se dedica al mantenimiento del campo de juego del Rey de Copas señaló las diferencias en su labor los días previos al partido: “Fertilizamos un poquito más, marcamos las líneas, preparamos las redes. Vemos el clima y nos adecuamos a si llueve o no”. Y agregó que al cierre de un torneo “tenés un trabajo más duro que si bien no está a la vista, es arduo”.

Luis Frías, con un paso previo por el complejo que tiene Independiente en Villa Domínico, detalló que durante la temporada de verano se utiliza un “césped de bermuda”. “Esta gramilla es rastrera y se va tramando por lo que se pone más densa y necesita una base con más arena para que no haya pozos. En cambio, en invierno, el crecimiento es individual”, explicó.

En ese sentido, Núñez agregó: “Con la llegada del frío se hace una resiembra. Se pela toda la gramilla, se tira la semilla de invierno, la drenás y después crece el césped. En invierno no se hace el corte vertical, también llamado “verticorte” porque una semilla equivale a un césped a diferencia del césped bermuda”. A modo explicativo, detalló: “El corte vertical, es que se hace con una cuchilla que tiene ‘tres dientes’ que sirve para sacarle densidad al césped. Depende el césped o la temporada hay otros cortes como helicoidales, cortes normales, frontales. Cambia mucho el tipo de corte según la temporada y el tipo de césped”. En ese sentido, Leandro Pace añadió: “La máquina de corte vertical es para sacar la densidad, eso hace que el juego sea más dinámico, corre más rápido la pelota, es menos denso y evita lesiones”.

El reconocimiento externo. Los tres trabajadores detallan que cuando escuchan comentarios o se les acercan personalidades del mundo del fútbol como Marcelo Gallardo, Miguel Ángel Russo y los felicitan dimensionan dónde están: “Ahí caes en que estamos trabajando en uno de los clubes más grande de Argentina y que, cuando juega Independiente, tienen todos los ojos puestos acá”, detalló Leandro Pace.

Los tres trabajadores coinciden en la importancia de haber formado un “equipo de trabajo”. “Es lindo laburar así porque trabajás mejor. Cuando hay buen clima y confianza en nosotros es diferente”, subrayó Núñez.

Los trabajadores y el gremio. Además de las capacitaciones que resaltaron durante la entrevista, Núñez y Pace también accedieron a los beneficios consecuentes de la paternidad. “Disfruté el ajuar y los pañales. Y después, cuando crecieron, también nos dieron los kits escolares”, remarcó Núñez. “Los kits escolares los recibí siempre y la verdad estoy agradecido porque ayuda mucho”, completó Pace.

Por su parte, Luis Frías recordó su participación en los torneos interseccionales organizados por UTEDYC. “Nosotros viajamos a Mar del Plata por el fútbol y nos trataron como profesionales, teníamos hotel, desayuno, nos daban de comer, charla técnica, todo”. Además de reconocer la relación que establecieron con otros colegas de diferentes clubes, Núñez agregó: “Nosotros nos sentíamos futbolistas y es un pequeño sueño. Es un cable a tierra para los trabajadores y después pasan los años y es lo que nos queda. Todo los que anhelamos jugar al fútbol… en ese momento fuimos felices”.

El Club Atlético Independiente se encuentra en el ámbito de representación de la Seccional Zona Sur.
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