Los desorbitados costes de transporte marítimo y materias primas, sumado a problemas logísticos que pone en jaque la disponibilidad de stock, están llevando a los proveedores de fitness a plantearse una subida de precios de cara a 2022, si la situación no mejora.
Poco margen de contención. Muchos proveedores españoles y de Latinoamérica de equipamiento de fitness, se encuentran en la encrucijada de no poder asumir por mucho tiempo más los aumentos en los costes de producción y transporte del material procedente de Asia que ha ocasionado la pandemia. De hecho, advierten, de no cambiar las nuevas condiciones de mercado, se verán obligados a repercutir en parte o en su totalidad los incrementos en los costes en sus tarifas para 2022.
Así lo han admitido distintos proveedores a la revista digital CMDsport, quienes desgranan la actual problemática con la producción asiática que arrastra el sector del fitness desde el estallido de la pandemia y sus posibles consecuencias a corto y medio plazo.
Fuente: CMDsport