Fuente: Clarín – La asistencia a los gimnasios se incrementó un 7% por ciento desde 2019 hasta 2022, según indica la Cámara Argentina de Gimnasios. Lo cual se traduce en tres millones de personas en todo el país y cerca de 680 mil en la ciudad de Buenos Aires.
“La pandemia modificó mi rutina y me enseñó el hábito de hacer actividad física. El sedentarismo y el trabajo diario frente a una computadora habían impactado en mi cuerpo y las pastillas que tomaba como paliativas me estaban reventando el estómago. Mi estilo de vida cambió cuando empecé el gimnasio. Tengo mejor ánimo, tomo más agua y elijo comidas saludables”, confiesa Georgi Maekaneku (38) en diálogo con Clarín.
Para Georgi, pagar una cuota mensual por entrenar representa una inversión en salud antes que un gasto. Su experiencia refleja una tendencia que creció en pandemia. Según la Cámara Argentina de Gimnasios (CAS), el incremento de asistencias a los gimnasios por parte de los usuarios tuvo una variación del 7% desde el año 2019 hasta la actualidad.
La entidad calcula que 3 millones de personas entrenan en instituciones a nivel nacional y 680.000 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Y aclaran que el dato preciso se complejiza porque no todos los gimnasios cuentan con sistemas y molinetes. “En septiembre, Mercado Fitness va a realizar un evento que reúne a los principales operadores del sector. Ahí tendremos números más finos y menos estimaciones”, puntualizan.
Asimismo, estima que entre 2019 y 2022 un millón de personas se incorporaron a realizar algún tipo de actividad física. En porcentaje, representa un aumento del 2%.
La importancia de la actividad física es una de las moralejas que dejó el confinamiento. Foto Juan Manuel Foglia
Adrián Stoll, vicepresidente de la Cámara Argentina de Gimnasios, le explica a Clarín: “Esta cifra estimada, que antes era sedentaria, está realizando algún tipo de actividad en instituciones, hogares y plazas. Nuestro gran logro es estar presentes en la consideración de la población como la mejor alternativa para ejercitarse en forma controlada y segura”.
Y detalla: “En general, el que venía entrenando transitó la enfermedad con un aparato inmunológico activo porque generó conciencia de que la actividad física es una herramienta fundamental para vivir más y mejor. La pandemia demostró que los clubes y gimnasios son agentes de salud”.
Flavia Zapata (50) apuesta a clases de zumba y stretching para recuperar su peso. Y sobre todo, a cursos de yoga como doctrina antiestrés. “En post pandemia empecé con un proceso de reacomodamiento general. Empecé a ir a un gimnasio de barrio con la idea de dejar atrás los 20 kilos que obtuve durante la cuarentena, en una época de exhaustivo sedentarismo”, comparte con este medio.
Crisis económica vs. actividad física
La pandemia dejó un saldo positivo: cada vez hay más personas haciendo actividad física. Lo que antes era una excepción se transformó en moneda corriente.
En nuestro país, un millón de personas se habrían sumado a la actividad física tanto en gimnasios como en parques y plazas. Foto Juan Manuel Foglia
Según la Agencia Gubernamental de Control (AGC), que depende del Gobierno de la Ciudad, en los últimos 3 años hubo 63 nuevas habilitaciones en el rubro: 30 en 2020, 21 en 2021 y 12 hasta junio del año vigente (sin contar las pendientes de resolución).
Desde la entidad remarcan que como el trámite suele demorar varios meses, puede verse impactado más tarde.
“Desde la Cámara pensamos que más que un boom representa la consolidación de la actividad física como parte de los buenos hábitos. Hay mucho interés por la buena salud como eje de la vida plena. Esta pandemia nos enseña que es fundamental tener el aparato inmunológico en orden para poder hacerle frente sin mayores problemas”, evalúa Stoll ante la consulta de Clarín.
Entrenar no solo tiene beneficios para la salud física, sino también para la mental. Foto Juan Manuel Foglia
Y señala que en los últimos meses se reportaron reaperturas de espacios con una nueva propuesta comercial. Por ejemplo, un club con pileta de Caballito se transformó en un gimnasio low cost sin pileta. “Hay una porción de la población que sigue entrenando en plazas y parques”, agrega.
Las promociones y ofertas están a la orden del día y, por lo general, se enfocan en premiar a quienes se comprometen por mayor tiempo con el gimnasio. Así, algunos lugares ofrecen 12 cuotas sin interés o la posibilidad de no abonar matrícula o el primer mes del plan si se compra un pase anual. Otros, reducen el valor de cada cuota mensual cuando el usuario compra el paquete anual.
Entre Megatlon y Fiter tenemos entre 35 mil y 40 mil usuarios por día. A nuestros socios les garantizamos que van a pagar el año sin aumento de cuotas. Lo que pagan hoy va a ser igual a lo que abonen en julio en 2023″, le dice a Clarín Fernando Storchi, CEO de Megatlon y Fiter.
“La actividad física es necesaria para todas las personas, mas allá del sexo o de la edad. Los niños y adolescentes la precisan para su desarrollo y crecimiento adecuado; los adultos y personas mayores para mantener un buen estado de salud y prevenir diversas patologías”, indica Ricardo Corral, presidente de la Asociación Argentina de Psiquiatras.
Los gimnasios salen a atraer a la gente que se sumó a la actividad física con planes a largo plazo y promociones. Foto Juan Manuel Foglia
Y entre sus múltiples beneficios destaca: “Mejora la fuerza muscular y el sueño, eleva la autoestima, optimiza el rendimiento cognitivo, reduce el riesgo de desarrollar Alzheimer y previene enfermedades como hipertensión, obesidad, diabetes y accidentes cerebrovasculares».
Sin embargo, la crisis económica y la incertidumbre cambiaria golpean los bolsillos y dificultan la posibilidad de costear una cuota. “Ante este panorama, las promociones y los planes por ‘ahora 12’ estimulan el uso en periodos prolongados. Los gimnasios son muy accesibles comparado a otros gastos y frente una crisis es lo último que debiera cortarse. En ningún otro lado se recibe tanto por tan poco”, analizan desde la Cámara de Gimnasios.
Una cadena en crecimiento
On Fit es la primera cadena low cost de gimnasios de Argentina. La semana pasada inauguró su décima sucursal en Saavedra y en los próximos dos meses planea nuevas aperturas: Quilmes, La Plata y Maschwitz.
“Trabajamos para satisfacer las necesidades de un público cada vez más exigente. En tiempos tan desafiantes, cuando los clientes necesitan estar bien física y psíquicamente, el gimnasio se transforma en un cable a tierra donde logran descargar todas las tensiones de la semana”, le dice a Clarín Guido Miguez, director de la cadena On Fit.
En el gimnasio se puede hacer distintos tipos de actividades según cada necesidad, asistido por profesionales. Foto Juan Manuel Foglia
“Soy socia de la sede de Olivos desde octubre de 2021. La pandemia me ayudó a organizar mi trabajo y a darle más prioridad a mi salud. Nunca es tarde para empezar alguna actividad”, le dice a Clarín Shagine Zabian (33), de nacionalidad venezolana, mientras toma un descanso de su rutina diaria.
Un dato interesante es que se incorporan cada vez más personas de elevado rango etáreo porque están impulsadas por el pedido de sus médicos de realizar actividad física.
«Nuestra apuesta es tener la mejor relación precio beneficio del mercado. A los clientes los premiamos por su fidelidad, entonces cuanto más tiempo están, menos pagan. Si uno viene un mes la cuota es de 5190. En cambio, si paga todo el año, la cuota es de 3590. También tenemos promociones especiales de Internet para que la gente venga a conocernos. Con los beneficios del Hot Week ganamos 250 nuevos clientes», ilustra Miguez.
«Me inscribí en un gimnasio por la disponibilidad horaria, cercanía y comodidad. Si vas con frecuencia, el precio se retribuye. Uno piensa que es un gasto importante pero, al fin de cuentas, termina siendo una inversión”, sintetiza Lourdes Naún (21).