Escasez de materia prima, precios altos, problemas de fabricación por covid, cada vez más deportes afectados.
Grandes y pequeñas marcas, fabricantes de equipamiento y hasta de bebidas deportivas. Golf, ciclismo, fitness, running y más, son muchos las disciplinas que se están viendo afectados por la escasez de algunos elementos que ponen no en riesgo pero si en estado de alerta al deporte en general, en Europa, en Estados Unidos y en el resto del mundo también.
Una de las tantas consecuencias que trajo la pandemia fue la obligatoriedad de cerrar fábricas para evitar la propagación del virus y también la falta de demanda en el 2020 de determinados productos. Marcas de calzado que tienen sus fábricas en Vietnam e Indonesia ya advirtieron que no sólo esos cierres temporales del pasado retrasaron la producción, también los tiempos de tránsito desde los lugares de origen se modificaron, al igual que los costos de logística.
Los cascos son uno de los faltantes. (GETTY)
«Los factores que presionan las cadenas de suministro y la inflación incluyen retrasos en los puertos, escasez de contenedores, interrupciones por Covid, falta de componentes, materias primas e ingredientes, presiones en los costos laborales y escasez de camiones y conductores», explicaron en la BBC.
¿Qué falta? En principio, las resinas de plástico, minúsculos gránulos que se utilizan para fabricar de todo. Pelotas, fundas, cascos, calzado, botellas, como algunos ejemplos. El mismo es un derivado del petróleo y son las mismas petroquímicas las que advirtieron hace tiempo el enorme aumento en los costos de fabricación. En algunos casos por el Covid, por la fata de demanda durante el inicio de la pandemia y también porque muchos no lograron trasladar esos aumentos a los productos.
También el precio del cloruro de polivinilo o PVC, se disparó un 70%, el precio de las resinas epoxi, un 170%. El etileno, que se usa para casi todo, un 43%; explicaron los analistas. El caucho, otro producto esencial, también triplicó su precio y se vio afectada su producción por la pandemia.
Al reactivarse la actividad deportiva, las empresas se encontraron con la falta de productos deportivos y la imposibilidad de cumplir con los pedidos sumado a una alta demanda.
El Tour de France, que se prepara para el 2022, asegura que deberán usar repuestos de las bicicletas ya usadas porque no hay repuestos nuevos. Y que ciertos elementos deberán durar más de la cuenta. «Una cadena se cambia cada 2.000 kilómetros y ahora deberán durar 2.500 a 3.000«, dice Le Parisien.
El golf también está sufriendo falta de equipamiento. El fútbol americano sufre la falta de cascos, las pelotas de tenis tampoco sobran. Cada deporte tiene su propio problema de abastecimiento.
Las formas de consumo han cambiado en todo el mundo por el Covid. Y entre esos cambios habrá que cuidar más todo el equipo deportivo porque ess posible que no se pueda reemplazar…
Fuente: Bolavip